Para un vasco, cantar es algo innato, una necesidad vital. No es raro ver a un grupo de amigos en un restaurante cantando una canción a capella, sin ningún instrumento, sólo por el placer de compartir un buen rato, porque cantar es parte integrante de la celebración.
Las canciones tradicionales no son sólo piezas musicales, sino que representan las raíces y la historia del pueblo vasco. Algunas veces, las melodías son tristes y otras muy alegres, pero siempre se cantan con fervor.
Su profesor de canto le introducirá en el canto coral y, por supuesto, traducirá la letra del repertorio elegido para ayudarle a expresarse plenamente. Es una gran oportunidad para dar una oportunidad a su voz y un buen momento de relajación para compartir en grupo